La Junta Directiva de ANPCA se ha reunido en el marco de la Feria Internacional del Ajo de Las Pedroñeras(FIDA) para analizar la campaña actual de ajo que ya se ha dado por finalizada en sus tareas de recolección y almacenamiento en Castilla-La Mancha, quedando algunas parcelas en la zona norte de España de ajo morado que finalizará su recolección en breve.
En el análisis realizado por la Junta Directiva se ha puesto de manifiesto que esta campaña 2024 ha vuelto a contar con una superficie menor que la campaña anterior, entorno a un -14% con respecto a 2023, siendo más acentuado este descenso en el ajo morado, que por primera vez ha caído por debajo del 40% del total de la superficie cultivada. Este descenso de superficie cultivada se suma al descenso del año pasado de un 17%, lo que supone un descenso total en los dos últimos años de más del 30% con respecto a la superficie cultivada en 2022.
Sin embargo, según los registros de la Asociación, la producción total final comercializable se ha podido mantener similar a la de 2023 como consecuencia de un aumento de los rendimientos con respecto a la campaña anterior, con una calidad buena que se ha visto favorecida por las condiciones climáticas favorables durante toda la campaña del cultivo. Sólo unas pocas partidas de ajo de la variedad Spring se vieron afectadas en el mes de junio por algunas tormentas localizadas no llegando a ser significativas en comparación con las del año pasado.
En lo referente al mercado internacional, la demanda está siendo muy calmada con operaciones menores a las esperadas debido a la competencia de operadores tradicionales como China y nuevos operadores como Egipto y Turquía. En uno de los principales mercados históricos del ajo español como es Brasil, se ha incrementado notablemente su producción local, por lo que su demanda de ajo español se ha visto reducida drásticamente. Respecto al principal operador en el mercado internacional, China, la calidad de este año es buena y los precios que están ofreciendo son muy competitivos.
En resumen, por parte de ANPCA se califica esta nueva campaña como aceptable en calidad y con buenos rendimientos, lo que vuelve a colocar al ajo español como referente en el mercado europeo e internacional a nivel de calidad y seguridad alimentaria. Sin embargo, la Asociación muestra su preocupación por la disminución, campaña tras campaña, de la superficie cultivada de ajo Morado. Desde ANPCA se anima a los productores de ajo de España a seguir apostando por esta variedad ya que es la variedad autóctona de España, que nos proporciona una ventaja competitiva muy apreciada en los mercados internacionales debido a su excelentes propiedades y características.
Ante esta situación, ANPCA ha iniciado una serie de acciones destinadas a intentar mejorar la situación del cultivo, como la reivindicación de la producción integrada en el ajo en la principal comunidad autónoma productora de España, Castilla-La Mancha, con el objetivo de implementar una producción sostenible y más respetuosa con el medio ambiente. Además, la situación de eliminación de materias activas disponibles para el cultivo propicia que la producción integrada sea una vía necesaria para esta región.
En lo referente al mercado internacional, la actuación de ANPCA va dirigida a la presentación ante la D.G. TAXUD de la Comisión Europea de una solicitud para la aclaración de los códigos TARIC sobre los que se importa ajo a la UE. Esta nueva redacción solicitada por ANPCA aclararía la identificación de las partidas arancelarias correspondiente a cada producto, evitan la introducción de ajo fresco a través de la partida correspondiente al ajo congelado eludiendo así los aranceles disuasorios que este cultivo tiene establecidos en la Unión Europea.
ANPCA actualmente es la mayor asociación europea de productores y comercializadores de ajo, con una superficie asociada de 12.457 hectáreas en este año 2024, y un volumen de más de 208 millones de kilos comercializados en la pasada campaña, lo que supone una cifra superior al 80% del total comercializado de España, y un 65% del total de Europa. Actualmente cuenta con 69 empresas comercializadoras asociadas y casi 1.800 productores de ajo.
En la reunión de su Asamblea General Ordinaria celebrada el pasado día 4 de abril, la Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajo, ANPCA, ha presentado el Plan Estratégico para el sector del Ajo Español 2024. Un documento que recoge las directrices de actuación que esta Asociación va a realizar para esta campaña de ajo.
En esta reunión de la asamblea general de ANPCA, se han presentado los datos del cultivo en estas últimas campañas. En especial, los datos de superficie cultivada de ajo en España que arrojan unas cifras con un descenso superior al 30% sumando estas dos últimas campañas con respecto a la superficie del 2022 por lo que, a juicio del secretario de la Asociación, D. Jose Carlos Arroyo (PROACO S.L.), “muestra las grandes dificultades en cuanto a cultivo que el ajo español está atravesando, especialmente la del ajo morado que por primera vez su superficie cae por debajo del 40% del total de la superficie cultivada.”. “El fuerte incremento de los costes de producción unido al resto de problemas como son cada vez un acceso al agua más complicado, la dificultad de mano de obra, una PAC que no ayuda a este sector ya que dificulta el acceso a tierras de arrendamiento, y un sinfín más de problemas que el profesional de ajo tiene que hacer frente simplemente para producir un alimento que es básico para la dieta mediterránea, y que a su vez dinamiza el medio rural generando riqueza y puestos de trabajo garantizando la supervivencia de nuestros pueblos”.
Sin embargo, el ajo, considerado cultivo social por la Unión Europea, se encuentra cada vez más indefenso ante la avalancha de medidas que tanto los gobiernos europeos como nacionales están adoptando en el sector agrario, con especial hincapié en la desmantelación del sistema de defensa fitosanitaria del cultivo, con la eliminación sistemática de materias activas que comprometen el cultivo frente ataques de plagas y enfermedades. En este sentido, D. Andrés García (ANTOGAR S.L.) presentó la defensa de la estrategia presentada por ANPCA en el pasado grupo de contacto del comité mixto FR-IT-ES de solicitar a la Comisión Europea que las autorizaciones de nuevas materias activas para su uso frente a las plagas se realicen de manera conjunta por zonas de LMR y no por países. El objetivo de esta estrategia es hacer más rentable el esfuerzo económico que una empresa tiene que hacer para registrar una nueva materia activa sumando con un solo registro el total de hectáreas cultivadas en los diferentes países dentro de la misma zona. En palabras de García: “nuestra intención es la de favorecer y acelerar el proceso de registro de nuevas materias activas que nos permitan aumentar el número de defensas frente a las plagas y enfermedades actuales. Si no lo conseguimos, un cultivo social como es el ajo tenderá a desaparecer de nuestros campos y nos veremos abocados a consumir ajos de terceros países que no tienen ni la misma calidad ni seguridad alimentaria que los nuestros”.
Para cerrar la jornada, el presidente de la Asociación, D. Juan Salvador Peregrin (SAT PEREGRIN) realizó la presentación del Plan Estratégico para el Sector del Ajo Español, documento que recoge las líneas maestras de actuación del sector en los próximos años con el objetivo de volver a situar al ajo español donde se merece: “tenemos que recuperar el liderazgo a nivel europeo e internacional en términos de calidad y seguridad que nuestro ajo ha mostrado en los últimos años”. Para ello, el presidente ha presentado un plan con 3 puntos principales que se han centrado en el manejo de la producción, el análisis de los procesos en las instalaciones y control de factores externos.
Según Peregrin, “el manejo de la producción se debe de realizar bajo unos estándares de excelencia que nos aseguren, en la medida que el clima lo permita, unos resultados a la altura de la calidad de ajo español”. “Para ello tenemos que controlar, incluso desde antes de poner un pie en la parcela, todos los parámetros posibles, centrándonos en la semilla, en su cuidado, como inicio de la generación de un producto de calidad”. “Posteriormente, en los procesos en las instalaciones se deben de aplicar unos protocolos de calidad global que nos asegure que el producto mantenga la excelencia con la que ha salido de la parcela y nos de como resultado el ajo que ha sido y es referente en toda Europa”.
Para finalizar la reunión, se abordaron otros temas de interés del sector, como son los de la vigilancia y supervisión de los acuerdos bilaterales de libre comercio que la UE firme con terceros países, la preocupación de la situación del sistema de seguro agrario en España, los problemas laborales a los que las empresas del sector tienen que hacer frente año tras año, la lucha contra el fraude y la vigilancia de la correcta comercialización de los productos para evitar fraudes al consumidor. De estos diversos temas en lo referente al mercado internacional, la actuación de ANPCA va dirigida a la presentación ante la D.G. TAXUD de la Comisión Europea de una solicitud para la aclaración de los códigos TARIC sobre los que se importa ajo a la UE. Según D. Juan Blazquez (Cooperativa SANTA MÓNICA): “esta nueva redacción solicitada por ANPCA aclararía la identificación de las partidas arancelarias correspondiente a cada producto, evitan la introducción de ajo fresco a través de la partida correspondiente al ajo congelado eludiendo así los aranceles disuasorios que este cultivo tiene establecidos en la Unión Europea”.
ANPCA actualmente es la mayor asociación europea de productores y comercializadores de ajo, con una superficie asociada de 10.215 hectáreas en este año 2024, y un volumen de más de 220 millones de kilos comercializados en la pasada campaña, lo que supone una cifra superior al 80% del total comercializado de España, y un 65% del total de Europa. Actualmente cuenta con 65 empresas comercializadoras asociadas y casi 1.800 productores de ajo.
La Junta Directiva de ANPCA se ha reunido en el marco de la Feria Internacional del Ajo de Las Pedroñeras(FIDA) para analizar la campaña actual de ajo que ya se ha dado por finalizada en sus tareas de recolección y almacenamiento en Castilla-La Mancha, quedando algunas parcelas en la zona norte de España de ajo morado que finalizará su recolección en breve.
En el análisis realizado por la Junta Directiva se ha puesto de manifiesto que esta campaña 2023 ha contado con una superficie menor que la campaña anterior entorno a un 15% según los registros de la Asociación y que la producción final se ha visto reducida aún más por las condiciones climáticas adversas sufridas durante la finalización del cultivo.
Esta campaña se ha visto marcada por la sequía en la mayor parte de las regiones productoras, afectando de manera muy relevante a Andalucía. En el mes de abril, unas temperaturas extremadamente altas y escasísimas lluvias, provocaron un descenso en los rendimientos muy acentuados en las cosechas tempranas. En contraste, los meses de mayo y junio, se vieron afectados por una temporada de lluvias persistentes que, en lo referente a los cultivos más tardíos como el ajo morado, afectó al desarrollo de estos campos con la aparición de diferentes problemas fitosanitarios en la finalización del cultivo con un descenso en rendimientos por la disminución de calibres. Este descenso en los rendimientos se calcula entre un 30-40% con respecto a una campaña normal.
La calidad de esta cosecha 2023 en las variedades tempranas ha sido baja en cuanto a aprovechamiento de las cabezas. En cuanto a la variedad de ajo morado, la calidad es similar a la campaña pasada, pero lo relevante en esta variedad ha sido la bajada significativa de los rendimientos por la falta de calibre.
Esta situación de bajos rendimientos, ha provocado que los costes de producción por hectárea se hayan vuelto a disparar, ya que unido al incremento general de los costes de producción superior al 37% en esta campaña, como son la energía, los arrendamientos, los insumos y sobre todo los costes salariales, se ha unido una bajada en los rendimientos que ha provocado que el incremento de coste de producción de 1 kg de ajo se haya disparado por encima del 45% con respecto a la campaña anterior.
En lo referente al mercado internacional, la demanda está siendo muy calmada con operaciones menores a las esperadas debido a la competencia de operadores tradicionales como China y nuevos operadores como Egipto y Turquía. En uno de los principales mercados históricos del ajo español como es Brasil, se ha incrementado notablemente su producción local, por lo que su demanda de ajo español se ha visto reducida drásticamente. Afortunadamente, la calidad de China este año es baja y los precios que están ofreciendo sus ajos son ligeramente más altos que en campañas anteriores.
En resumen, por parte de ANPCA se califica esta nueva campaña como muy baja en rendimientos y con una evolución complicada. La campaña en el ajo temprano Spring y el morado puede ser muy diferente, debido a que el ajo Spring este año ha tenido rendimientos medios aceptables, pero con una calidad ligeramente más baja, mientras que el ajo tardío o morado no ha sufrido en calidad pero si en rendimientos y calibres.
Ante esta situación, ANPCA ha iniciado una serie de acciones destinadas a intentar mejorar la situación del cultivo, como la reivindicación de la producción integrada en el ajo en la principal comunidad autónoma productora de España, Castilla-La Mancha, con el objetivo de implementar una producción sostenible y más respetuosa con el medio ambiente. Además, la situación de eliminación de materias activas disponibles para el cultivo propicia que la producción integrada sea una vía necesaria para esta región.
En lo referente al mercado internacional, la actuación de ANPCA va dirigida a la presentación ante la D.G. TAXUD de la Comisión Europea de una solicitud para la aclaración de los códigos TARIC sobre los que se importa ajo a la UE. Esta nueva redacción solicitada por ANPCA aclararía la identificación de las partidas arancelarias correspondiente a cada producto, evitan la introducción de ajo fresco a través de la partida correspondiente al ajo congelado eludiendo así los aranceles disuasorios que este cultivo tiene establecidos en la Unión Europea.
ANPCA actualmente es la mayor asociación europea de productores y comercializadores de ajo, con una superficie asociada de 13.087 hectáreas en este año 2023, y un volumen de más de 220 millones de kilos comercializados en la pasada campaña, lo que supone una cifra superior al 80% del total comercializado de España, y un 65% del total de Europa. Actualmente cuenta con 69 empresas comercializadoras asociadas y casi 1.800 productores de ajo.
La Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajo, ANPCA, se reunió en su nueva sede de Las Pedroñeras (Cuenca) para analizar la situación por la que está atravesando el sector del ajo español y europeo, así como para analizar el “desafío normativo y legislativo” que el Ministerio Español de Agricultura tiene previsto aplicar para el próximo año.
El nuevo marco regulatorio nacional y comunitario para el sector frutas y hortalizas, con una fuerte regulación que entrará en vigor en su mayoría a comienzos del año próximo, plantea unos retos que, a razón de las empresas y asociaciones representadas en FEPEX, procedentes de todas las regiones españolas, son complicadas de asumir. Según el presidente de la ANPCA, Juan Salvador Peregrin, “esta nueva regulación afecta de manera muy importante al sector productor de ajo, y pone en serio peligro la continuidad de la producción de este alimento tan necesario no sólo en las casas de los consumidores, sino también en nuestros pueblos y comarcas. La ley de envases unida a la ley de reducción de uso de fertilizantes, la de contratos agrarios, el sistema de información de explotaciones agrarias (SIEX), la gestión de la nueva PAC y los ecoesquemas, etc, junto con la estrategia emprendida por la Comisión Europa denominada “Farm to Fork”, está llevando al límite la posibilidad de cultivar ajo en Europa ante la gran complejidad burocrática con la que se está cargando a un sector que, lo único que quiere, es producir alimentos”.
Además, en esta reunión se abordaron temas como la nueva Ley de la Cadena Alimentaria, y su problemática aplicación a las operaciones internacionales en un sector donde casi el 60 % de lo producido se dedica a la exportación. “En las relaciones con nuestros clientes internacionales nos obliga a someternos a legislación del comprador, que en muchos casos no conocemos bien, porque los compradores Internacionales no están dispuestos a tragar con esta Ley” sentencia Antonio Escudero, vicepresidente de ANPCA. “El problema de la entrada de ajo de terceros países a la Unión Europea, sin control fitosanitario y con unos costes laborales mucho más bajos, afecta de manera muy importante a la comercialización de nuestro ajo. En este sentido, desde ANPCA, hemos solicitado al Comisión Europea un esclarecimiento y unificación de los códigos TARIC aplicados al ajo, con el fin de evitar posibles casos de fraude”.
En cuanto a la próxima campaña, el descenso en la superficie cultivada se está comprobando según pasan los meses. Se estima que la bajada en superficie para la próxima campaña puede incluso superar el 25% con respecto al año anterior. María Moreno, de ANPCA, añade que “La siembra del ajo temprano se ha estado desarrollando durante estos meses de atrás, y la falta de agua, y los costes elevados de energía, arrendamientos y mano de obra, hace prácticamente inviable el cultivo del ajo. Si a todo esto le sumamos la inversión necesaria para cumplir con el aluvión de legislación, no sé cómo lo vamos a poder afrontar”.
Ante este escenario, ANPCA, junto con el resto de las asociaciones pertenecientes a FEPEX, han solicitado una moratoria para la entrada en vigor del paquete legislativo porque es imprescindible para poder afrontar la avalancha normativa y burocrática que al sector se le viene encima. Si el gobierno de España y la UE no aplican esta moratoria, lamentablemente tememos que miles de agricultores abandonen no solo el cultivo del ajo, sino el campo español en los próximos años. ANPCA actualmente es la mayor asociación europea de productores y comercializadores de ajo, con una superficie asociada de 15.397 hectáreas en este año 2022, y un volumen de más de 256 millones de kilos comercializados en la pasada campaña, lo que supone una cifra superior al 80% del total comercializado de España, y un 65% del total de Europa. Actualmente cuenta con 67 empresas comercializadoras asociadas y casi 1.800 productores de ajo.
La Junta Directiva de ANPCA se ha reunido en el marco de la Feria Internacional del Ajo de Las Pedroñeras (FIDA) para analizar la campaña actual de ajo que ya se ha dado por finalizada en sus tareas de recolección y almacenamiento.
Con una superficie similar, según los registros de la Asociación, con respecto al año anterior, la producción final se ha visto reducida por las condiciones climáticas adversas sufridas durante la finalización del cultivo. Durante los meses de marzo y abril, las olas de frio sufridas, con incluso nevadas a comienzos de abril y las sucesiones de frentes lluviosos, propiciaron una falta de horas de luz que afectó de manera muy significativa al desarrollo de las plantas en las dos principales zonas productoras de España, Castilla- La Mancha y Andalucía.
En contraste, los meses de mayo y junio, se caracterizaron por una subida repentina de las temperaturas que provocaron una rápida maduración de los bulbos y por consiguiente, un finalización temprana sin alcanzar su máximo potencial de calibre, por lo que la falta de calibre ha propiciado una disminución de entorno al 20% de la producción final.
La calidad de esta cosecha 2022 en las variedades tempranas ha sido ligeramente inferior a la calidad de campañas anteriores debido a falta de capas por la maduración temprana. Sin embargo, en la variedad de ajo morado, la calidad ha sido excepcional, pero con una bajada significativa de los rendimientos por la falta de calibre.
Esta situación, ha provocado que los costes de producción por hectárea se hayan disparado, ya que unido al incremento general de los costes de producción superior al 21%, como son la energía, los arrendamientos, los insumos y sobre todo los costes salariales, se ha unido una bajada en los rendimientos que ha provocado que el incremento de coste de producción de 1 kg de ajo se haya disparado por encima del 37% con respecto a la campaña anterior. A este incremento se añade el agravante de la incertidumbre sobre la evolución de los precios en el resto de campaña de almacenamiento, que se alarga sobre 11 meses en cámaras frigoríficas, cuyo coste energético es una total incógnita.
En lo referente al mercado internacional, la demanda está siendo muy calmada y con unos costes logísticos disparados. La falta de presencia de Brasil en el inicio de campaña, el remanente de ajos de la campaña anterior, y el incremento de las cosechas locales en los principales países de destino, han propiciado que las ventas a la exportación estén siendo muy lentas, y los almacenamientos estén estimados para largo plazo. El incremento de los costes logísticos, con subida de precios generalizadas de las navieras, han influido de manera muy determinante en la bajada de ventas de exportación a terceros países, provocando una situación generalizada de parada en las ventas.
En resumen, por parte de ANPCA, esta nueva campaña se estima complicada, con una situación de incertidumbre muy notable en su evolución, tanto en el mercado nacional como en el internacional.
Ante esta situación, ANPCA ha iniciado una serie de acciones destinadas a intentar mejorar la situación del cultivo, como la reivindicación de la producción integrada en el ajo en la principal comunidad autónoma productora de España, Castilla-La Mancha, con el objetivo de implementar una producción sostenible y más respetuosa con el medio ambiente. Además, la situación de eliminación de materias activas disponibles para el cultivo propicia que la producción integrada sea una vía necesaria para esta región.
En lo referente al mercado internacional, ANPCA ha realizado una consulta ante la Dirección General de la Competencia de la Unión Europea para que se investigue la posible existencia de acuerdos de facto entre las principales empresas navieras para la subida simultánea de los precios en la logística internacional, ya que afectan de manera muy significativa a la capacidad de alcanzar los mercados de exportación del ajo español, producto del que se exportó más del 70% de la producción de la campaña pasada.
Otro de los puntos de actuación de ANPCA es la presentación ante la D.G. TAXUD de la Comisión Europea de una solicitud para la aclaración de los códigos TARIC sobre los que se importa ajo a la UE. Esta nueva redacción solicitada por ANPCA aclararía la identificación de las partidas arancelarias correspondiente a cada producto, evitan la introducción de ajo fresco a través de la partida correspondiente al ajo congelado eludiendo así los aranceles disuasorios que este cultivo tiene establecidos en la Unión Europea.
ANPCA actualmente es la mayor asociación europea de productores y comercializadores de ajo, con una superficie asociada de 15.397 hectáreas en este año 2022, y un volumen de más de 256 millones de kilos comercializados en la pasada campaña, lo que supone una cifra superior al 80% del total comercializado de España, y un 65% del total de Europa. Actualmente cuenta con 67 empresas comercializadoras asociadas y casi 1.800 productores de ajo.
La Asamblea General Extraordinaria de ANPCA en la Finca El Valenciano Rural Innovation Hub
La Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajo, ANPCA, se reunió en su Asamblea General extraordinaria en la Finca El Valenciano Rural Innovation Hub, propiedad de su empresa asociada BALAM AGRICULTURE, situada en Carmona (Sevilla), con motivo del inicio de campaña de recolección del ajo nuevo español.
Durante la jornada se abordaron las inquietudes mostradas por las empresas asociadas sobre la preocupante situación laboral a la que se enfrenta el sector con la aplicación de la nueva reforma laboral. Este nuevo escenario complica de manera muy importante el uso de mano de obra en un sector que anualmente cotiza más de 750.000 jornales. Según el presidente de la Asociación, Juan Salvador Peregrin, “esta nueva campaña de recolección se presenta muy complicada en lo referente a la contratación de mano de obra, obligando al agricultor a contratar a personal fijo discontinuo desde el primer momento sin conocer si este trabajador será apto o no para desarrollar su desempeño en el campo. Es un trabajo de carácter claramente temporal, que en muchos casos se circunscribe a las situaciones imprevisibles de evolución de cosecha”.
Además, en esta reunión se abordaron temas como la nueva Ley de la Cadena Alimentaria, y su problemática aplicación a las operaciones internacionales en un sector donde casi el 60 % de lo producido se dedica a la exportación. “En las relaciones con nuestros clientes internacionales nos obliga a someternos a legislación del comprador, que en muchos casos no conocemos bien, porque los compradores Internacionales no están dispuestos a tragar con esta Ley” sentencia Antonio Escudero, vicepresidente de ANPCA.
Otro tema de gran preocupación en el sector es la falta de productos fitosanitarios para atender la demanda del cultivo. En este sentido se expuso una tabla comparativa entre las materias activas autorizadas para el ajo en Italia, Francia y España, con un análisis de diferencias y se estudió la posibilidad de realizar acciones en el sentido de conseguir su autorización en España. El secretario de la Asociación, José Carlos Arroyo comentó que “la estrategia emprendida por la Comisión Europa de Farm to Folk, está llevando al límite la posibilidad de cultivar ajo en Europa”.
En cuanto al inicio de la recolección del ajo temprano español, se informó sobre la evolución de los primeros trabajos, con una climatología favorable y sin problemas de lluvias, con una muy buena calidad de los bulbos y buenos calibres. También se aprovechó para analizar la situación de los cultivos en el resto de las regiones, con un comienzo inminente de la recolección también en Castilla-La Mancha y buenas perspectivas de producción en zonas de Extremadura y Castilla y León. En cuanto al análisis de la situación internacional, que corrió a cargo de Andrés García, tesorero de la Asociación, la incertidumbre es la tónica general en todos los sectores y el ajo no podría escaparse de ella. La situación del transporte internacional, la inflación, la fortaleza del dólar que favorece nuestras exportaciones, o la situación de cosecha y previsiones de otros países productores y comercializadores de ajo, arrojan un escenario abierto para esta nueva campaña del ajo español y europeo.
Para finalizar la jornada, la empresa líder en bioestimulantes y biosoluciones SERVALESA, presentó las novedades en su porfolio para el ajo, con dos productos específicos para el sector, que aportan la solución necesaria a los tratamientos de semillas de ajos para asegurar una buena sanidad del cultivo y un bioestimulante para favorecer el desarrollo de la planta en las etapas más necesarias.
ANPCA actualmente es la mayor asociación europea de productores y comercializadores de ajo, con una superficie asociada de 15.397 hectáreas en este año 2022, y un volumen de más de 256 millones de kilos comercializados en la pasada campaña, lo que supone una cifra superior al 80% del total comercializado de España, y un 65% del total de Europa. Actualmente cuenta con 67 empresas comercializadoras asociadas y casi 1.800 productores de ajo.